Ella siempre espera su momento
No, ¿verdad?
No es fácil.
Incluso habiéndose apoderado de ti, no eres consciente de que ya te domina.
No hay tregua, todas y cada una de tus energías tienen un solo propósito, y están dirigidas hacia una cosa o persona, es lo que ella quiere, y tú no vas a impedirlo.
Tras llegar a la cumbre, tras devastar con todo, cuando todo lo que podías decir o hacer, ya lo hiciste, comienza la bajada.
De pronto, notas pensamientos contrarios a los que estabas teniendo hasta ahora.
Tus emociones y sentimientos comienzan a cambiar, otros nuevos aparecen, te hacen sentir incómodo, no es fácil darles paso.
Ahora, cuando todo ha pasado, o eso crees, es cuando te das cuenta de quién te dirigía, a quien diste carta blanca para actuar, y hablar, en tu nombre.
Se trataba de la IRA
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