SERENIDAD

Silvia Lorenzo

No hay serenidad que pueda comparse con la que se consigue con la aceptación de que la vida, la hayamos vivido como la hayamos vivido, fue lo mejor que pudimos hacer con ella.
El haber perdonado las malas decisiones porque al fin y al cabo nadie nos enseño cuales son las respuestas correctas y haberlo tomado como un aprendizaje.
El haber perdonado los daños recibidos, y sentirse libre de rencores.
Aceptación, autocompación, perdón y gracias...Son las palabras más comunes que existen y a la vez más dificiles de poner en práctica.
Es el ego en todos los casos el que no permite alcanzarlas.
porque caemos siempre en las mismas preguntas...por qué perdonar a quien nos daño? si no se lo merece o a lo mejor ni le interesa que lo perdonemos... simplemente porque el rencor es el veneno que uno toma para matar al otro...
Autocompación?...No es lo mismo que lástima, es comprensión...no somos perfectos, podemos equivocarnos...
Aceptación? A todos nos pasan cosas bellas o dolorosas, no somos las victimas eternas del universo, el por qué a mi ? no sirve más que para hacernos sentir miserables.
Gracias?...Estar vivos merece ser agradecido, porque hayamos vivido buenas o malas situaciones, no es lo importante. Lo que de verdad merece gratitud es la posibilidad de haber tenido siempre la oportunidad de volver a intentarlo.
Todo sirve para aprender y para lograr la tan ansiada y
grandiosa SERENIDAD.