la Depresión.

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Continuando con mi reflexión , sobre la Depresión.
Aparte de mi Adicción convivía con diferentes estados depresivos el mio es el popular "TLP", trastorno límite de personalidad.
Apuntemos que ni el cáncer de piel ni la depresión son inventos del siglo 21.
No obstante el ritmo de vida de esta época sí que determina la prevalencia cada vez mayor que hace cien años apenas se diagnosticaba. "Sí en ese momento decías que estabas muy deprimido sólo te podían responder con un: " Te Fastidias". No había nada que hacer, pero hoy es mucho más útil decir que estas deprimido porque existen muchos tratamientos, también ha aumentado la frecuencia de la depresión porque esta ligada con el mundo en que vivimos. El ritmo de vida moderna es muy dificil de llevar, porque los estándares del éxito han aumentado.

La soledad es muy grande y muy peligrosa. Y añadamos otro factor: " La gente duerme menos de lo se solía antes de que apareciera Internet o la misma Televisión". Todo esto son detonantes sí la persona enferma no es capaz de mantener un equilibrio porque no se nos puede olvidar otro jugador: " Su excelencia El Estrés". Amigos estamos sometido a mucha presiona y no sabemos encontrar nuestros límites o lo que es peor no nos los ponemos.

Mi Ejemplo:
Aparte de mi Adicción convivía con diferentes estados depresivos yo los dividía en tres etapas, me explico:

1- Desencanto, nulidad es cunado no te interesa nada de lo que
sucede.
2- Sensación de dolor por el mero echo de estar vivo.
3- Y por último es ansiedad que aumenta y uno se siente
aterrorizado todo el tiempo, sin comprender muy bien qué te
da miedo?.

Pasar de unos estados a otros, en el momento en que se esta depresivo, se hace de una manera rapidísima , son tantas las personas de renombre que han sido y son depresivas, que da la sensación que es un trastorno que agudiza el ingenio en muchas facetas de la vida.
Pongamos algunos ejemplos: "Miguel Angel, Tolstoi, Virginia Wolf y un largo, etc....."
En mi humilde opinion el amor no cambia tu cerebro pero es un gran apoyo para combatir esta enfermedad, la compañía no es la única medicina para combatir esta dolencia que solo reconocen un tanto por ciento muy bajo respecto a la realidad, el tratamiento farmacológico también es clave. Yo particularmente tomo mis pastillas y acudo al psicoanalista.
Espero que con mis reflecciones ayude a otros a entender muchas cosas y sobre todo a que encuentren respuestas a situaciones, que se pueden vivir con ellas con toda normalidad.
Fernando Reyes Crespo.