miércoles, 23 de abril de 2014

AYUDA...COMO DEJAR LAS DROGAS!!

Ayuda, como dejar las drogas:::

¿Quieres dejar de consumir y no sabes cómo? ¿Tienes dificultades para dejar el alcohol, la cocaína u otras drogas? ¿Piensas que serás incapaz de dejar el consumo, que estás enganchado? ¿Usabas las drogas por diversión y piensas que quizás se están convirtiendo en un hábito o una necesidad? ¿Te has cansado de consumir pero no sabes cómo ponerle freno? ¿Has tratado de ponerte límites de consumo que luego no has cumplido? ¿Sales de fiesta y no puedes parar de consumir? ¿Has intentado dejar el consumo por ti mismo y te ha costado mucho no consumir y has vuelto a hacerlo? ¿Consumes únicamente los fines de semana pero últimamente sólo esperas que lleguen esos días para consumir?

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Éstas y otras son muchas de las preguntas que se encuentran en foros, páginas especializadas, páginas de salud general, etc., sobre el tema de las drogas. Es lógico que puedan surgir todas estas dudas cuando, después de un periodo consumiendo, bien sea habitualmente u ocasionalmente, surgen dificultades al querer cesar el consumo, a veces la fuerza de voluntad queda aplacada por el deseo de consumir.

Hay que tener muy presente que una persona que consume no tiene porque ser un adicto, hay varios tipos de consumo y cualquiera de ellos puede acarrear problemas para la persona. El consumidor puede hacer un uso de la sustancia bien sea experimental, social, ocasional, etc. Es decir, al principio, se consume para probar, experimentar, para ser más sociable, etc. Aunque hay muchas personas que se quedan aquí, es decir, hacen un uso de una o varias drogas y después lo dejan sin muchas complicaciones, hay otras que pasarían a hacer un abuso de las sustancias, donde se consume de forma habitual y los efectos negativos del consumo superan a los positivos. Finalmente se llega a la dependencia. En esta fase se habla de varios criterios que deben estar presentes como: tolerancia, pérdida del control, deseo intenso de consumo, empleo del tiempo en el consumo y por lo tanto reducción de las actividades sociales y laborales y, se continúa consumiendo a pesar de tener conciencia de problemas físicos y/o psicológicos causados o exacerbados por el consumo.

Como ya hemos comentado varias veces, dejar de consumir no es únicamente reprimirse, el objetivo único no es la abstinencia. Para dejar de consumir es necesario modificar y reeducar varios aspectos de tu vida ya que de lo contrario, la probabilidad de volver a consumir es muy alta. Incluso, lo que sucede algunas veces, es que cuando una persona está un periodo abstinente y vuelve a consumir de nuevo, el deseo es mucho mayor, parece que se tenga que recuperar el tiempo perdido.

Llegados a este punto, si te estás planteando que tu relación con las drogas no es la adecuada,  y has llegado hasta aquí porque estás desorientado, porque piensas -quiero dejar de consumir pero no puedo, necesito ayuda, consejos-, decirte que ya has dado un gran paso, buscar información y ser consciente de todas las posibles opciones que tienes en los diferentes centros de drogodependencias.

Ahora lo importante es saber lo que te está pasando, y no hace falta que te machaques diciéndote que eres un alcohólico, drogadicto, cocainómano, etc., porque son simplemente etiquetas. Lo fundamental es saber qué problemas y dificultades tienes para poder trabajarlas conjuntamente con un profesional.

Entendemos que te puedan surgir muchas dudas en todo este proceso, y sabemos que el hecho de que uno mismo reconozca que tiene un problema, sea de la temática que sea, puede costar, por ello a continuación tienes una serie de preguntas que te pueden ayudar a reflexionar.

¿Qué cosas te hacen pensar que esto sea un problema o dificultad para ti? ¿De qué manera o hasta que punto esto te preocupa, como te influye?

¿Qué dificultades has tenido con la forma en la que utilizas las drogas?¿Qué es lo que te preocupa de tu situación actual de consumo? ¿De qué manera el consumo de sustancias ha sido o es un problema para ti? ¿No te ha permitido hacer lo que querías? ¿Qué crees que puede pasar si continuas consumiendo? ¿Qué crees que te ocurriría si no realizas un cambio?

Piensa que si estás leyendo esto, indica que quizás una parte de ti cree que hay algo que no funciona bien, o no encaja, y que ha llegado el momento de hacer algo al respecto, por lo tanto: ¿Qué te hace pensar que quizás ha llegado el momento de dejar el consumo, de realizar un cambio? ¿Cuáles serían las razones por las cuales es posible un cambio? ¿Qué tendría que ocurrir para poder realizar este cambio? ¿Qué podrías hacer tú para favorecer este cambio?

¿Qué aspectos te hacen pensar que tienes que continuar consumiendo de la misma forma que lo haces actualmente? ¿Cuáles serían las ventajas de dejar el consumo? ¿Y los inconvenientes?

- ¿Por qué bebes? -preguntóle el principito.
- Para olvidar -respondió el bebedor.
- ¿Para olvidar el qué? -inquirió el principito, que ya le compadecía.
- Para olvidar que tengo vergüenza -confesó el bebedor bajando la cabeza.
- ¿Vergüenza de qué? –indagó el principito, que deseaba socorrerle.
- ¡Vergüenza de beber!- terminó el bebedor, que se encerró definitivamente en el silencio.
Y el principito se alejó, perplejo.
Las personas grandes son decididamente muy, pero muy extrañas, se decía así mismo durante el viaje.

Antoine de Saint- Exupéry, El principito*

Si después de reflexionar sobre estas preguntas consideras que por el momento no necesitas o no estás preparado para realizar un cambio, por el motivo que sea, no está de más que puedas tener todas estas preguntas en mente y seguir reflexionando sobre ellas para ir valorando tu situación y plantearte un cambio más adelante, si lo consideraras necesario.

Por otra parte, si decides que es el momento de realizar un cambio en tu vida, plantéate, ¿Qué es lo que quieres cambiar? Es decir, ¿Qué cambios quieres hacer?  ¿Cuáles son las razones para hacer estos cambios? Piensa también que objetivos puedes ponerte para iniciar estos cambios y que acciones puedes realizar para conseguirlos. Por ejemplo: Quiero dejar de consumir >> Quizás tengo que dejar de ir con gente consumidora (objetivo) >> Dejaré de salir de fiesta los fines de semana (acción). También es muy importante que puedas fijarte fechas concretas para empezar a realizar estas acciones y cambios.

Puede ser muy útil que reflexiones sobre ¿Qué es lo que podría funcionar para ti? Es decir, ¿Qué estrategias te pueden ser útiles? Para ello puedes tratar de recordar otros cambios significativos en tu vida y ver que estrategias te fueron eficaces. También puedes reflexionar sobre cuáles son los obstáculos, aquello que te puede impedir alcanzar lo que quieres, para así tenerlo presente y explorar alternativas.

Además puedes tratar de valorar que confianza tienes en ti mismo para hacer este cambio ya que este factor es muy importante para realizar el cambio. Por ejemplo, en una escala del 1 al 10, ¿Dónde situarías la confianza en ti mismo para cambiar, para dejar el consumo?

También es interesante que puedas plantearte quien podría ayudarte en este proceso de cambio. Puedes coger un papel y tratar de anotar que personas te pueden ayudar y de qué forma. Por ejemplo: Mi madre me puede ayudar administrándome el dinero, porque si lo llevo encima tengo tentaciones de gastarlo en consumo.

Algo que debes tener muy presente cuando te planteas quien puede ayudarte y apoyarte en este proceso, es quien verdaderamente puede hacerlo. En un principio puede parecer que todo el mundo está dispuesto a ello pero la realidad es que esto no es así. Hay que poder analizar quien verdaderamente puede ser útil para ello.

Por lo que respecta a la familia, pueden ser un gran apoyo pero no siempre es así. En ocasiones la familia no sabe cómo abordar el tema, en ocasiones nos encontramos con, por ejemplo, un padre o una madre sobreprotectores, eso quiere decir que, en muchos casos, intentarán encubrir al hijo consumidor tratando de evitar más consecuencias negativas para este último. Hacer este tipo de acciones no es de ayuda para una persona que quiere dejar el consumo y que tiene ciertas dificultades para ello. Por tanto, es recomendable que la familia, si quiere ayudar a esta persona y no sabe cómo, se pueda dirigir a un profesional especializado  para que le guíe en todo momento respecto a todo el proceso. Para nosotras la familia, entendiendo la familia como la persona que convive con el consumidor, es de vital importancia para el tratamiento.

También los amigos pueden no ser efectivos en la ayuda ya que, en ocasiones estos amigos también son consumidores o son amigos de consumo, es decir, el objetivo principal de la relación con el otro es el propio consumo. Así, por ejemplo, un amigo consumidor, en un primer momento, cuando le comentas que pretendes dejar el consumo puede alegrarse por ti y decirte que te ayudará, pero después puede tratar de manipularte para que vayas a consumir con él. Con lo cual, si se pretende dejar el consumo lo más prudente es rodearse de amigos no consumidores.

A continuación te indicamos algunas estrategias que te pueden ser útiles para iniciar este cambio.
Escribe una carta desde el  futuro en la que contestes a estas preguntas, entre otras: ¿Cómo te imaginas después de un cambio? ¿Cuáles son las esperanzas que tienes? ¿Cómo has llegado a realizar estos cambios?
Escribe una carta desde el pasado: ¿Qué diferencias ves entre el presente y el pasado? ¿Cómo eras antes de consumir? ¿De qué forma el consumo ha hecho que no sigas adelante con tus objetivos y desarrollo personal? ¿Cómo eran las cosas antes de consumir?
Haz un autorregistro sobre tu consumo: Aquí tienes un ejemplo.:::

Fecha
Hora
Consumo
Lugar
Personas presentes
Pensamientos
Consecuencias
Dinero gastado
Cocaína y alcohol.
Casa de un amigo.
Compañeros de trabajo
Vaya día, necesito una…
No puedo dormir.
Otra vez he vuelto a consumir
A lo mejor mi novia lo nota......

Haz un autorregistro sobre el deseo de consumir: Cada vez que tengas ganas de consumir hazte las siguientes preguntas:
Intensidad de las ganas de consumir (siendo 1 pocas y 10 muchas)
¿Cuál crees que fue la causa de este deseo?
¿Qué estabas haciendo en el momento que apareció el deseo de consumo?
¿Qué sentías y/o pensabas en ese momento?
¿Qué hiciste para controlar el deseo?
Si estabas acompañado, ¿Qué hicieron las otras personas para  ayudarte a controlar el deseo de consumo?
Si no llegaste a consumir, ¿Cómo te sentiste después de haber controlado el deseo?
¿Cuánto duraron las ganas de consumir?

Como ya hemos comentado al principio de este artículo, si quieres dejar de consumir, aunque no lo tengas del todo claro, acude a un centro especializado. No obstante es importante que puedas valorar que tipo de centro, en un principio, crees que sería más conveniente para ti según tus necesidades, ya que no a todas las personas les va bien un mismo tratamiento ni un mismo tipo de centro. Aunque, cuando acudas a un centro ambulatorio especializado o bien al médico de cabecera, ellos te asesorarán y orientarán, según la evaluación de necesidades y dificultades, hacia el centro que sea más conveniente para ti.

Es importante, que en la medida de lo posible, reflexiones sobre tu situación, para que así puedas compartirlo con el profesional  y finalmente, de forma conjunta, decidir donde iniciar un tratamiento. Por ejemplo, si tu entorno es una situación de mucho riesgo para que consumas, quizás puede ser beneficioso para ti alejarte un tiempo del mismo haciendo tratamiento en una comunidad terapéutica o en un piso residencial.

El proceso de tratamiento para dejar el consumo, a grandes rasgos, empieza por la petición de información y de asesoramiento sobre el tema, debido quizás, a la ambivalencia interna sobre el consumo o a las consecuencias de éste, es decir, al hecho de querer dejar de consumir y seguir consumiendo a la vez. No obstante hay que tener en cuenta que muchas veces cuando una persona empieza un tratamiento, no es ésta quien ha elegido iniciarlo, sino que acude al centro por la presión de sus familiares o amigos, ya que éstos están preocupados por su consumo y conducta.

Seguidamente hay una petición de consulta en un centro profesional donde se realiza un primer contacto en una primera entrevista de acogida, para así realizar una valoración tanto médica, psicológica, social y educativa, para poder realizar un diseño del proceso terapéutico teniendo en cuenta las necesidades y características de la persona. A través de este link puedes ver las diferentes fases del tratamiento, así como los diferentes estados de cambio.

Esperamos que este artículo te haya servido de ayuda, no obstante ten presente que es simplemente una orientación, un primer paso, y bajo ningún concepto reemplaza las pautas establecidas por el profesional de referencia, no es un tratamiento para dejar las drogas.