martes, 3 de septiembre de 2013

El Alcoholismo

JAntonio Lucero
Esta noche quiero compartirles un estudio que realice para dar una charla sobre alcoholismo, en un grupo de apoyo, como parte de mi testimonio de vida, a continuación se los detalló, espero sea de utilidad para sus vidas, y de su entorno.
El alcoholismo es una enfermedad viro-metabólica condicionada por la exposición continuada del cuerpo al alcohol. Está caracterizada por el deseo insaciable de beber dicha sustancia, pérdida de control para no seguir bebiendo después que se comienza, dependencia física o aparición de síntomas después de la abstinencia, y tolerancia o necesidad de aumentar la cantidad de alcohol ingerida. Muchas veces las actividades de la persona giran en torno a la sustancia; es posible que dedique mucho tiempo a conseguirla, tomarla y recuperarse de sus efectos. Y a pesar de que vea las consecuencias, tanto físicas como psicológicas que le provoca el consumo, continúa consumiéndola.

Para la mayoría de las personas, el alcohol es un acompañamiento placentero para las actividades sociales. El uso moderado del alcohol--hasta dos tragos por día para los hombres y hasta un trago por día para las mujeres y personas mayores (La medida normal de un trago es una botella de 12 onzas de cerveza o bebida a base de vino (wine cooler), un vaso de 5 onzas de vino o 1.5 onzas de licor de 80º prueba) -- no es dañino para la mayoría de los adultos. Sin embargo, un gran número de personas tienen problemas serios con sus hábitos de consumo de alcohol. En estos momentos, cerca de 14 millones de americanos, 1 de cada 13 adultos, abusan del uso del alcohol o son alcohólicos. Además, varios millones de adultos tienen patrones o hábitos de consumir bebidas alcohólicas que los pueden conducir a problemas de alcohol. Aproximadamente 53 porciento de los hombres y mujeres en los Estados Unidos reportan que uno o más de sus familiares tienen problemas de alcohol.

Las consequencias del abuso del alcohol son serias--en muchos casos, de amenaza o peligro a la vida. Las personas que beben mucho alcohol pueden aumentar el riesgo de desarrollar ciertos tipos de cáncer, especialmente de el hígado, el esófago, la garganta, y la laringe (caja de la voz). El abuso del alcohol también puede causar cirrosis del hígado, problemas en el sistema de inmunidad, daño cerebral, y hasta puede dañar el feto durante el embarazo. El beber alcohol aumenta los riesgos de muertes por accidentes automovilísticos, accidentes durante actividades recreativas, accidentes en el trabajo, y la probabilidad de que ocurran homicidios y suicidios. En términos estrictamente económicos, los problemas relacionados con el uso del alcohol le cuestan a la sociedad aproximadamente 100 billones de dólares por año. En términos de vida humana, el costo es incalculable.


Existe una enzima en el cuerpo encargada de destruir el alcohol, llamada aldehido deshidrogenasa, pero no todas las personas las poseen por igual. En el hombre la podemos encontrar en dos lugares, primero en la mucosa del estómago y luego en el hígado, en cambio la mujer sólo tiene esta enzima en el hígado, no posee en el estómago o, en todo caso, se encuentra en un porcentaje 80 veces menor. Un hombre puede llegar a absorver el 25% del alcohol que consume en el estómago, mientras que la mujer no, por eso es menos resistente a sus efectos. Una vez en el hígado el alcohol se metaboliza, generando otras sustancias también tóxicas para el organismo.

Todo el alcohol que el hígado no es capaz de absorver pasa a la sangre (alcoholemia) y de allí va directamente al cerebro, afectando al sistema nervioso central. Existen algunos casos extraños en que la persona no posee la deshidrogenasa en su cuerpo, son aquellos individuos a los que el alcohol les sienta mal, produciéndoles náuseas, diarreas, calor, ruborización, etc. por lo que no lo pueden tomar.

Es posible medir el consumo global de alcohol en la población de un país, concretamente en España se beben 20 litros de alcohol por habitante y año, mientras que en Suecia el consumo está en 5 litros por habitante al año. La tasa de enfermedad cirrótica en España también es mucho mayor, de 24 personas por cada cien mil habitantes, y en Suecia está en dos personas de cada cien mil.

El alcoholismo es un problema que tiene poco que ver con el tipo de alcohol que se consume, cuanto tiempo se ha estado bebiendo, o la cantidad exacta de alcohol que se consume. Sin embargo, el alcoholismo tiene mucho que ver con la necesidad incontrolable de beber de la persona. Esta definición de alcoholismo nos ayuda a entender porque para la mayoría de los alcohólicos un "poco de fuerza de voluntad" no es suficiente para dejar de beber. El alcohólico o la alcohólica se encuentra frequentemente bajo el control de un deseo poderoso o necesidad de ingerir alcohol, una necesidad que puede sertirse tan fuerte como la necesidad de agua o comida. A pesar de que algunas personas se pueden recuperar sin ayuda, la mayoría de las personas alcohólicas necesitan ayuda externa para recuperarse de esta enfermedad. Con ayuda, apoyo y tratamiento, muchas personas son capaces de dejar de beber y de rehacer sus vidas.

¿Cuáles son las señales de que existe un problema de alcohol?

¿Cómo puede usted saber si usted o alguien cerca de usted tiene un problema de alcohol? El contestar las siguientes cuatro preguntas le podría ayudar a reconocer si existe un problema de alcohol. (Para ayudarle a recordar estas preguntas, recuerde que la primera letra de la palabra clave de cada una de las preguntas en inglés forman la palabra "CAGE.")

¿Ha pensado usted alguna vez que debe disminuir o cortar ("Cut") la cantidad de bebidas alcohólicas que usted toma?
¿Le ha molestado ("Annoyed") la gente al criticar sus hábitos de beber alcohol?
¿Se ha sentido usted alguna vez mal o culpable ("Guilty") debido a sus hábitos de consumo de alcohol?
¿Ha tomado usted un trago o bebida alcohólica acabándose de despertar en la mañana para tranquilizar sus nervios, para abrir los ojos ("Eye opener"), o deshacerse de los efectos después de una borrachera ("hangover")?
El contestar "Sí" a una de estas preguntas sugiere la posibilidad de que existe un problema de alcohol. Si usted contestó que "Sí" a más de una de las preguntas es muy probable que exista un problema de alcohol. En cualquiera de estos casos, es importante que usted vea a un doctor(a) o enfermera(o) inmediatamente para que discuta sus contestaciones a estas preguntas. El(ella) puede ayudarle a determinar si usted tiene un problema relacionado a sus hábitos de consumo alcohol, y si usted tuviese un problema, esta persona le puede recomendar lo que debe hacer al respecto.

Reconocer que se necesita ayuda con un problema de alcohol no es fácil. Sin embargo, tenga presente que mientras más pronto una persona obtiene ayuda, mejores son las probabilidades de que él(ella) se recupere exitosamente.

Son muchos los beneficios de abandonar el consumo de alcohol, como tener una mayor agilidad mental, un aumento del bienestar físico, más apetito, disfrutar de mejor humor, conducir de manera más segura, ahorrar dinero, mayor concentración y rendimiento en el trabajo, y aumento de la autoestima.

JAntonio Lucero Si alguna desea ayuda, con gusto puedo darle sugerencias pero todo empieza en uno en reconocer que se necesita ayuda ante esta adicción que nos afecta nuestra vida. Todo es posible si se tiene la correcta actitud para afrontarlo.....yo voy en el noveno año, el camino. No ha sido fácil pero con la ayuda de Dios, y de los grupos de apoyo, y de apoyarme en la Palabra de Dios todo es posible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario