martes, 28 de octubre de 2014

Aplicando el perdon = sanacion interior


Jason Morera


Que es el perdon ?
La psicología describe el perdón como un proceso que desarrolla el individuo interiormente y que beneficia mas al que perdona que al que se le perdona.
Muchas son las razones por las cuales una persona pide perdón , en su mayoría para sentirse bien con ellos mismos. Otros para sentirse perdonados por algo que se les había convertido en una carga insoportable.
La persona que pide perdón es aquel que se considera responsable de haber causado algún daño a alguien en un momento de enojo o para vengarse.
Muchas son las veces en que la persona pide perdón y no es perdonada, pues al individuo al cual se le pidió perdón no esta listo para hacerlo pues sus heridas todavía no han cicatrizado.
A quien le cuesta mas pedir perdon:
Les cuesta pedir perdón a las personas que no admiten sus errores y tiene su auto estima muy baja y tienen poca tolerancia a la crítica de otros estas personas no quieren verse vulnerables , esto porque tienen un ego muy alto se notan recios con la idea de pedir perdon por una ofensa causada en un momento de no control sobre todo del enojo , parte del programa de recuperacion manda a hacer enmiendas directas otras tendra que ser Dios el que las haga ya que si la persona las hiciera haria mas daño del que se hizo alguna vez por las actitudes de vida ingobernable del consumo activo
El perdón tiene un efecto muy positivo y libera a la persona que perdona porque al hacerlo desarrolla sentimientos de amor hacia su persona y se siente mejor consigo mismo.
El perdonar es una manifestación de poseer altos valores morales y trae como consecuencia sanidad y libera a la persona de sentimientos de enojo, rencor y odio.
Al perdonar no necesariamente se olvida ni la persona se reconcilia con su agresor, pero puede vivir sin la pesada carga del resentimiento y deseos de venganza contra la persona a la cual no se le había podido perdonar esto me permite liberarme de pensamientos toxicos y destructivos que sin temor a equivocarme provocan enfermedades psicosomaticas , adicciones y un sin numero de comportamientos autodestructivos que no son de beneficio para la persona que los vive.
Que necesito desarrollar para perdonar :
Sin lugar a dudas necesito desarrollar empatia con la persona que voy a perdonar esto me va a permitir entender que la persona que hizo la ofensa no es mala simplemente repite comportamientos y actitudes aprendidos muchos de estos comportamientos los imito de alguna figura importante de su niñez por ejemplo un hombre agresor de mujeres repite lo que vio de pequeño en su familia posiblemente vivio toda su niñes viendo como papa golpeaba a mama sin lugar a dudas la mayoria de estas personas repiten en su edad de desarrollo lo que vivieron como una valvula de alivio al trauma provocado en su niñes ahora con esto no quiero decir que apruebo el comportamiento agresor ya que hoy en dia hay demasiada ayuda disponible para trabajar con estos comportamientos no existe una justificacion logica para este tipo de actitudes , ahora necesito desarrollar una completa conciencia de que lo que necesito perdonar es el alivio que busco por lo tanto tengo que romper con los mecanismos defensivos de minimizar por ejemplo: no es tanto el otro año lo perdono cuando con el simple echo de recordar la persona lugar o cosa hasta ganas llorar le dan , victimizarse : a mi fue el que me hizo el abuso porque tengo que perdonar si fue esa persona la ofensora el o ella deberia venir y pedirme perdon ( recordemos perdonamos en beneficio propio no del otro ) el salirme del papel de victima y en vez de darme lastima de mi mismo empiezo a buscar a toda costa el perdon me va a permitir sanar y por consiguiente sentirme en paz conmigo mismo.Perdonar no es síntoma de debilidad, porque no se trata de dar permiso al otro para que vuelva a hacer daño, sino que se puede perdonar cuidando de que no nos hagan daño de nuevo.

El proceso de perdonar:
Cuando perdonar
Si el daño que se ha recibido trasciende el hecho emocional de sentirse injustamente tratado y lo único que se va a conseguir del otro es una compensación emocional, el perdón está plenamente indicado. También, cuando la búsqueda de la reparación se ha convertido en el centro de la vida del ofendido o interfiere con el seguimiento de otros valores, el perdón le permitirá poner distancia emocional para tener en cuenta todos los valores que está dejando de atender. Hay que tener en cuenta que no se trata de ponerse en riesgo de que el daño se pueda volver a repetir.
Primera etapa: análisis y reconocimiento del daño sufrido
El proceso comienza en la fase de análisis de lo ocurrido, incluyendo en ella el reconocimiento del daño que se ha recibido. Es preciso reconocer que se ha recibido un daño que duele, y aceptar ese dolor. Se hace de forma lo más objetiva posible, lo que va a permitir un distanciamiento emocional y los primeros pasos para entender las motivaciones del ofensor; lo que constituye un comienzo para construir una cierta empatía hacia el otro que está en la base del perdón.
Segunda etapa: elegir la opción de perdonar
El perdón para la víctima es una buena opción en cualquier caso. La metáfora del anzuelo que sugiere Steven Hayes, indica de forma clara cómo el no perdonar a alguien nos coloca en una situación permanente de sufrimiento y puede ayudar en este proceso:
Quien nos ha hecho daño nos ha clavado en un anzuelo que nos atraviesa las entrañas haciéndonos sentir un gran dolor. Queremos darle lo que se merece, tenemos ganas de hacerle sentir lo mismo y meterle a él en el mismo anzuelo, en un acto de justicia, que sufra lo mismo que nosotros. Si nos esforzamos en clavarle a él en el anzuelo, lo haremos teniendo muy presente el daño que nos ha hecho y cómo duele estar en el anzuelo donde él nos ha metido. Mientras lo metemos, o lo intentamos, nos quedaremos dentro del anzuelo. Si consiguiéramos meterle en el anzuelo, lo tendríamos entre nosotros y la punta, por lo que para salir nosotros tendremos que sacarle a él antes.
Si salimos del anzuelo, tendremos cuidado de no estar muy cerca de él porque nos puede volver a meter en el anzuelo y si alguna vez nos juntamos, tiene que ser con la confianza de que no nos va a volver a hacer daño.
Pero no es la opción de no sufrir lo que justifica una elección, sino una opción basada en los valores de la persona . Hay que tener en cuenta que se trata de valores como los define la terapia de aceptación y compromiso, es decir, como consecuencias deseadas a muy largo plazo, y no solamente como valores morales o éticos. Cuando hemos dejado a un lado esos valores para centrarnos en la venganza y se le hemos dedicado tiempo y recursos, pueden estar afectadas otras áreas de nuestra vida. Es en los valores afectados por la concentración en vengarnos en los que tenemos que encontrar los motivos para elegir perdonar.
Tercera etapa: aceptación del sufrimiento y de la rabia
Si se ha elegido la opción del perdón, para llevarlo a cabo es preciso aceptar, en el sentido expuesto, los pensamientos, sentimientos, sensaciones y emociones. La aceptación es un proceso que finalmente lleva al cambio; pero hay que tener en cuenta que su objetivo no es la extinción del sufrimiento, sino el compromiso con los valores y el fortalecimiento de la acción comprometida con ellos .
Cuarta etapa: establecer estrategias para autoprotegerse
El perdón no implica la aceptación incondicional del peligro de que ocurra de nuevo el ataque. En el análisis de lo ocurrido hay que incluir también la consideración de cómo los comportamientos de la víctima que han podido permitir o favorecer la ofensa. Analizando lo que ha ocurrido, la víctima se puede dar cuenta de cuales eran los indicios que indicaban el peligro, lo que le dará más posibilidades de evitarlo en el futuro.
Quinta etapa: una expresión explícita de perdón
La expresión explícita del perdón es un paso importante aunque algunos pacientes puedan pensar que es solamente simbólico y vacío de contenido. Se pueden articular muchos ritos o maneras hacerlo. Esta acción explícita no es el final del proceso de perdón, sino la oficialización del inicio. Hay que tener en cuenta que es preciso volver a repetir el proceso siempre que sea necesario, ya que el ofendido no está libre de que le aparezcan de nuevo los, pensamientos, emociones, sensaciones y sentimientos asociados a la ofensa. Cada vez que surjan de nuevo los pensamientos, sentimientos, sensaciones y emociones asociados a la ofensa, se tienen que repetir los pasos que sean necesarios.
Conclusion :
El perdon es un acto de amor a mi mismo la rapidez con que lo quiera hacer va a depender en parte de mi autoestima y en parte de mi disposicion de cambio el proceso de recuperarme conlleva dolor pero dolor por una recompensa espiritual ya no dolor autodestructivo como lo causa el resentimeiento , la fe en un Dios como cada quien lo entienda sera de gran beneficio durante este proceso de sanacion , la humildad de pedirle ayuda a alguien que haiga pasado por este proceso sera indispensable o si no se tiene la confianza en alguien un psicologo es de gran ayuda para el proceso de sanacion que es tan necesario para encontrarme conmigo mismo . saludos a todos felices 24