"Legalizar venta de marihuana es querer apagar un incendio con galletitas al agua"

11:00 | Así lo entiende el encargado de Políticas de Adicciones de la Intendencia de Maldonado, Gabriel Freitas, consultado por FM Gente sobre el anuncio de que el gobierno impulsará la legalización de la venta de marihuana. A juicio del jerarca, la iniciativa “deja más dudas que certezas” y sería más adecuado "apretar el acelerador a fondo" para impedir que las pasta base ingrese al país de contrabando.

Freitas opinó que, en principio, la ley que propone el gobierno genera más dudas que certezas, deja vacíos sin resolver e incluso se puede volver en contra del objetivo de frenar el consumo de pasta base. Advirtió, asimismo, que la legalización de la venta de cannabis podría violar un acuerdo internacional aprobados por Uruguay sobre prohibición de la comercialización de ciertas sustancias.

“En una etapa anterior se habló de que se iba a fomentar el auto-cultivo, que no viola ninguna ley internacional, porque se supone que es para el consumo propio de la persona que lo cultiva.Pero ahora se está hablando de legalizar la venta y hasta cobrar impuestos para destinarlos a centros de adicciones”, observó.

Freitas también manifestó sus dudas respecto al efecto de la legalización de la venta en los consumidores. Además, en su opinión, no se ha hecho todo lo posible para frenar el ingreso de pasta base al país.

“No se ha tocado el acelerador a fondo para frenar la pasta base. Uruguay no tiene cocinas de cocaína, toda la droga entra de contrabando. Ajustemos la frontera, que no tenemos 2.000 km para todos lados”, recomendó el jerarca, afín a reducir el ingreso de las sustancias.

Por otra parte, mostró dudas en cuanto a los mecanismos de contralor de la venta, tanto en cuanto a cantidades (40 cigarrillos por mes) como a consumidores (se habla de crear un registro).

“El alcohol es la droga más dañina y es legal, incluso tiene ciertas leyes para contralor y no se controla porque, por ejemplo, se le vende a menores o se expende se vende a menores en horas prohibidas. ¿Quién me va a garantizar que van a poder controlar la producción de marihuana y que sean 40 porros por mes por persona? Tampoco me queda claro que el mercado paralelo o ilegal, deje de funcionar porque haya uno legal”, manifestó Freitas.

Aunque aclaró que es frenteamplista y que se siente identificado con la propuesta del gobierno “en un 99%”, el jerarca entiende que "tal vez se está buscando una solución a un tema que es complejo por un camino que no es el correcto”.

"A las ideas aisladas de este estilo le tengo un poco de temor. La percepción que me da, en base a mi trabajo dentro del problema, es que no creo que terminar con la pasta base pase por legalizar la venta de marihuana. Es como querer apagar un incendio con galletitas al agua, no me parece una medida suficiente para terminar con las bocas de pasta base", concluyó.