A menudo nos cuesta admitir que hay cosas que aunque nos gusten tenemos que prescindir de ellas, porque el daño que nos hacen no compensa el estar atados a ellas, por esa razón es mejor dejarlas a un lado y dedicarnos a vivir en libertad porque lo que nos gusta a veces nos ata y nos hace esclavos.
Se puede sí se quiere.
Se puede sí se quiere.
No hay comentarios:
Publicar un comentario