
Este es un personaje peculiar. Bondadoso, lleno de espíritu y con un gran corazón, Él nos va a acompañar en nuestro libro. Si te identificas con porque paradójicamente en ellas se encuentra la clave para volver a vivir.
Era muy especial, porque creía ingenuamente y de forma en ocasiones algo irracional que con amor todo se podía conseguir. Un pensamiento muy hermoso de no fácil aplicación. Durante gran parte de su vida se dedicó a luchar por los demás y a buscar la felicidad del otro, buscó hacer realidad el tan escaso altruismo, que tanto necesitamos ver en forma práctica y veraz.
El se desgastó pero no mermó ni un ápice sus cualidades excepto cuando comenzó a coquetear con las drogas duras, las rayas, las filas. La espiral peligrosa e injusta que sólo afecta, en el sentido de contraer la enfermedad de la adicción, a unos pocos, pero demasiados son los riesgos que se asumen con tales decisiones.
La Cocaína pudo con Él y fue esa su asignatura pendiente. Cuando se rindió a la evidencia empezó su restauración. Es curioso que se puedan vencer grandes batallas sólo cuando uno se rinde a la evidencia. Un largo y lento proceso de aprendizaje que le costó gran parte de su tiempo y no menos un esfuerzo de superación personal que en nada compensó ninguno de los engaños que ese maldito viaje pueda aparentar proporcionar. Incluso a pesar de "la luna se miel" que se experimenta. "Hay caminos que al hombre le parecen rectos y su final es un final de muerte" La Biblia
El destacaba por muchas facetas, todas ellas, decantadas del lado artístico, muy melancólico e impulsivo en sus acciones y pensamientos, sin embargo digno de ser ayudado y comprendido al menos. Digamos que era una bomba de relojería si se comparte con la sustancias estimulantes que, paradójicamente, en su caso, cuando contrajo su adicción le produjeron un efecto totalmente contrario. Su corazón luchaba contra su sistema nervioso central y eso hizo que tuviera capítulos muy desagradables en su vida.
La historia de Este Ser Humano es una historia que contiene grandes episodios de suma importancia. Nunca dejó de amar y nunca dejó de sufrir si bien, llegó a la conclusión de que sólo alguien muy especial podría comprenderlo más claramente que ninguna de sus relaciones sociales. La religión bien entendida hizo por él más de lo que Él hubiera imaginado nunca y encontró en ella una fuente de inspiración y ayuda. Esto es vital para entender cuán maravilloso es un Dios que restaura, que redime.
El podía vivir cualquier vida que se propusiese, tenía ese don. Podía ser un capitalista de derechas y con gran labia para convencer al mismísimo diablo o podía hacerse pasar por un heavy-metal sucio y porrero aunque no se supiera liar un canuto. Tenía esa cualidad, no sé si quizá, producto de eso contrajo la adicción o más bien un conjunto de factores, aunque me inclino por esto último. Todavía hoy no se sabe por qué contraemos las adicciones, sólo sabemos variables que interactúan para que se produzca.
Recuerdo muy bien todas sus etapas, desde su pelo engominado a lo Grease hasta su ralla al lado a lo Aznar. Recuerdo lo cómico que resultaba a veces.Vivió muchos tipos de vida sufriendo desgastes en cada una de ellas y valorando muy poco sus esfuerzos pero criticándose mucho sus fracasos. Uno de tantos pensamientos que facilitan el camino sin retorno al infierno.
Era inmaduro a la hora de analizar sus objetivos y eso le supuso más de un disgusto pero sin embargo luchaba por lo que creía que debía perseguir. La primera vez que se enamoró fue de una chica americana a la que amó con locura. Se conocieron en Sagunto mientras estudiaban y fue una relación verdaderamente maravillosa al principio. Ella era mayor que Él y pertenecía a la cultura americana. Ella se llamaba Yvette, que así era como se llamaba y era Americana. Pues bien, allí El muy joven conoció a Yvette y compartieron juntos esos bellos momentos, donde se parece actuar con una energía muy especial.
Al principio parecían una pareja impresionantemente feliz y El así se sentía. Hasta madrugaba para acompañar a Yvette a correr muy temprano en la mañana, casi sin salir el sol porque iban juntos, viendo amanecer antes de las clases para charlar, para hacer footing, actividades llenas de vida y de salud. Recuerdo que alguna mañana El se había quedado dormido, como es lógico y Yvette iba al internado a despertarle, chillando levemente su nombre por todas las escaleras con el lógico enfado que eso suponía para los demás chicos. Pero lo que de verdad quiero destacar es el hecho de la capacidad del ser humano para afrontar los problemas y su deseo interior de alcanzar el éxito.
La adicción a la droga, a cualquiera de ellas, es uno de los peores infiernos en los que un individuo puede verse envuelto.
Existen innumerables engaños en cualquiera de las adicciones a las que nos enfrentemos. En concreto yo mencionaré algunas que tiene la adicción a la cocaina.
Veamos en primer lugar el adicto puede creer que por cesar el consumo durante un periodo de tiempo largo han cesado algunos de los efectos nocivos que han tenido al ser humano esclavo en un sin fin de dolores y barreras, pues NO nada de eso es cierto. Los efectos no desaparecen aún con el periodo de abstinencia largo que se efectúe. El cerebro queda dañado de por vida, sensibilizado a la sustancia.
¿Es acaso posible romper totalmente con el pasado y comenzar una nueva vida? ¿Puedes ser otra persona? ¿Puede alguien prescindir de su historia?
Años más tarde El se encuentra sudoroso y agobiado, en la oscuridad de un hueco en su extraña habitación, agitado por el miedo, la ansiedad y la desesperación…. ¿Por qué, Dios Santo, nos has hecho libres? ¿Por qué…? ¿Por qué me siento culpable? ¿Comí yo del árbol prohibido? ¿Por qué, resultando ser inocente de contraer ésta terrible adicción, me siento tan culpable? Su pareja está dormida, tras su rayita de coca propia del "consumo responsable"… ¿Existe un consumo responsable? Las gotas de sudor caen sobre su cuerpo semidesnudo, en una hipervigilancia bárbara, que roza el cuadro paranoide y psicótico. Han sido muchas filas, muchos gramos. Sólo desea poder masturbarse con miles de imágenes pornográficas, que apenas podrá recordar si sale de ésta, si no se le para el corazón o presenta un cuadro isquémico o paranoide. "La cocaína me está matando" Pero, ¿por qué a mi pareja, no? Unos sí y otros no…. Si tú, querido lector, tienes tos y contraes un catarro, ¿tienes la culpa? ¿Hasta qué punto somos responsables de nuestras enfermedades?
En el centro al que asiste le dicen que sólo un porcentaje pequeño contraerá la adicción, entre un 10 y un 20%. "Esa palabra cruel que me esclaviza." Ha estado consumiendo y su orina huele a cocaína pura, a base, a un dolor extraño… Casi ya no es capaz ni de salivar, y está excitadísimo, pero ni siquiera puede asistir a un prostíbulo, porque no puede hablar, y todo le asusta, vive una hipervigilancia peligrosa y un bloqueo patognomónico y sin embargo, prepara otra enorme raya. Esta vez, si puede ser más grande que nunca, mejor, siempre más grande… ¿Por qué no puede parar?
Coge el coche, sin poder tan siquiera encender la luz de un mechero porque se angustia y con sigilo, para que no se entere la pareja con la que intenta vivir, y a la que le gusta la "farlopa" que no veas…trata de escapar sin percatarse que la cárcel está en su propio cerebro y mucho más en su alma endemoniada. Su codependiente, eso sí, que le queda muy claro, es muy responsable. No comete semejantes locuras, pero no dice no a un consumo esporádico para ello y mortal para El.
No puede entender las paradojas de la coca, las traiciones de la droga. Acude al camello, que si puede dejar un buen par de gramos y no articular palabra, mejor. Porque sólo quiere esconderse, y rogar para que no salga el sol, y no tener que verse la cara reflejada en el espejo, o en algún escaparate mojado de deseo…
Con la sola luz de su móvil, intenta esnifar otra raya más, con el nerviosismo propio de un delincuente cualquiera. Sólo quiere meterse más y más, y masturbarse. Pero no se deja, no se halla, no se encuentra. No puede hacerlo, experimenta una disforia sexual de calibre indeterminado.
Mi pareja me dira, cuando me recupere (si esa posibilidad existe,…), que me acepte, que me gusta, que sea coherente…. ¿Coherente? ¿Quién diablos es coherente con esto? ¿Los del consumo responsable, los que la saben utilizar…?
Los trastornos sexuales, sociales y emocionales son más que evidentes. La serotonina y la dopamina, neurotransmisores relacionados con el lívido, el hambre, el sueño y el placer, están profundamente alterados. Al cabo de 5 días ya, ¿podré tener una erección? Qué extraño… excitación máxima pero sin erección…Las prostitutas están cansadas, porque trabajan mucho para nada, aunque curiosamente El no les hace trabajar, ni siquiera exige sus derechos por lo pagado, El se vuelve "bondadosamente bueno" con ellas, viviendo un nuevo trastorno, ésta vez nada que ver con otros que se producen con la misma sustancia y que suponen violencia y agresividad. A El la coca le hace ser muy comprensivo con ellas. Está desquiciado, y ya no puede más. Hubiera sido cualquier cosa que se hubiese propuesto, menos cocainómano. Eso no sabe serlo, no sabe drogarse.
¿Quién ha visitado ésta dimensión, inmolado con sustancias llenas de vicio, de poder y de todo lo que el mundo ha demandado siempre? La aceptación, el dominio, el placer, la autoridad, Logan lo hizo. Os lo digo a vosotros, jóvenes que iniciáis esos viajes por el boomerang de las drogas de diseño… con la nueva ketamina, un mismo perro con otro collar, os lo aseguro que no va a haber nada igual. Ya no podréis encontrar jamás nada que se le parezca. Tan químico y tan poderoso. No podréis olvidar esa sensación. Y os perseguirá, como un lobo hambriento, el resto de vuestra vida. En el centro de ayuda, El aprende algo curioso. "NO ERES RESPONSABLE NI CULPABLE DE LO QUE TE HA PASADO". ¿Qué? se pregunta. No puede ser. "NO, SÓLO ERES RESPONSABLE DE TU REHABILITACIÓN"
El tardará en entender esta lección pedagógica, que tanto me recuerda al evangelio. Tras 9 años de lucha insufrible, se encuentra rehabilitado y vuelve a su pequeña iglesia. Ha llorado de verdad, los echaba de menos, los quería, los necesitaba. ¿Lo ayudarán? Él quiere vivir… El otro día hablé con El y le pedí permiso para escribir estas líneas. Me dio su consentimiento a cambio de una condición.
Quisiera que los que leyeran esto me contestasen a estas preguntas: ¿Somos realmente libres…? Yo elegí drogarme pero no elegí ser adicto. Mi ex pareja sigue consumiendo responsablemente. ¿Soy inocente o culpable…? ¿Podré romper completamente con el pasado, y empezar una nueva vida, y ser totalmente libre…? ¿La iglesia, seguirá queriendo cobrar las facturas de mis errores, o me dará la bienvenida…? ¿Entenderemos el peligro de esta sociedad, que nos convertirá en seres inocentes mientras nos ofrece la culpabilidad en un fruto prohibido…?
Nació en una familia acomodada, típicamente española, de los años 70, de la época de la famosa serie "Cuéntame" donde la figura del padre era inhibicionista y la de la madre protectora. El se crió entre el dinero de papá y las faldas de mamá. El pequeño de una familia de tres. Mimado y querido por todos, destacaba en casi todo y era un chico muy normal, lleno de vitalidad y energía. Su hermano mayor que él pronto enfrentó el primer contacto con la epidemia de la heroína de los 80, de la que su hermano mayor, al que adoraba, cayó sin remisión provocando un inmenso dolor en la familia, como en muchas de entonces, y produciendo un gran vacío en el joven y feliz hermano pequeño que vivía sin aparentes problemas reales pero que sin saberlo, quizá ni siquiera sus padres, crecía generando déficit emocionales, y al que muy pocas cosas se le negaban.
Las noches curiosamente terminaban en el videoclub, alquilando alguna peli porno para terminar su masturbación entre el "colocón" del alcohol y del poli-consumo, dato curioso para entender las disforias sexuales y sociales que veremos después. Al principio se consume esporádicamente, fiestas especiales, navidades, bodas, (como si a la droga le importara si es lunes o sábado), forma parte del engaño sibilino de negociar con el diablo y de no seguir los principios bíblicos que con tanto cuidado Dios ha dejado para nosotros.
La droga es un caso de posesión y es un tema tremendamente peligroso, nada que ver con Dios. El vivió un infierno pero apreció el valor de la teología. Hoy sigue cursando los estudios que una vez, tanta ilusión le proporcionaron, de hecho, yo diría que le proporcionaron la esperanza y la ilusión para salir adelante.
Hoy está felizmente casado y tiene dos maravillosas criaturas, divinas. Dios escribe sobre renglones torcidos. Dios es sencillamente maravilloso. Se puede vencer, se puede aceptar la maravillosa gracia que Dios nos ha concedido para vivir. Ojalá, tu vida pueda beber de éste único Dios tan exclusivo y buen
No hay comentarios:
Publicar un comentario