martes, 19 de junio de 2012

La potomanía


Mary Gonzales
La potomanía es el impulso de beber agua excesivamente aunque no se tenga sed, lo que trae consecuencias severas para la salud física y mental y se asocia con enfermedades como la bulimia y la anorexia


El agua es un líquido vital y es el componente más abundante del cuerpo humano ya que representa más de la mitad del peso corporal. Se encuentra distribuida en los diferentes tejidos y órganos corporales como los huesos, músculos, la sangre y todos los fluidos corporales.



Así, la concentración o sea el nivel de sodio en la sangre es un buen indicador del volumen de agua que existe en el organismo, cuando éste es elevado, el cuerpo retiene agua para diluir el exceso de sodio, aumentando la sensación de sed y produciendo menos orina. Por el contrario, cuando la concentración de sodio desciende demasiado, los riñones excretan más agua para restaurar el equilibrio.

La concentración de agua está equilibrada cuando se compensan las pérdidas diarias, y para ello, las personas sanas, con un funcionamiento normal de los riñones y que no transpiren excesivamente, deben tomar de un litro y medio de líquido a dos cada día, pero cuidado porque aunque es un líquido vital el consumo excesivo de agua, puede traer consecuencias fatales.



Todos los procesos que se realizan en el organismo, digestión, absorción de alimentos, circulación, respiración, excreción y eliminación de sustancias tóxicas, se llevan a cabo gracias al agua, por ello es importante reponerla diariamente.

A pesar de que el volumen de agua en la sangre es muy poco, es fundamental para el correcto funcionamiento del cuerpo y debe mantenerse permanente y constante. Sin embargo hay funciones o situaciones que cuando se presentan provocan la eliminación de gran cantidad de agua lo que aumenta la necesidad de su consumo más de lo normal porque se pone en riesgo el equilibrio existente: la diarrea, el vómito, las infecciones, el sudor excesivo, el consumir una alimentación excesivamente salada, son algunos de los factores que hacen que el consumo de agua deba aumentarse.

Por ello la cantidad de agua que necesita el organismo está condicionada por la necesidad de que los líquidos corporales tengan el volumen y la concentración de sales y componentes precisos para asegurar el equilibrio en las funciones biológicas.

El agua se absorbe en el organismo en distintos tramos del tubo digestivo y son principalmente los riñones los que se encargan de eliminarla como parte de la orina. La concentración ideal de agua presente en el organismo tiene relación con la cantidad de electrólitos que se tengan, que son soluciones o sustancias disuelta que constan de diversos químicos que ayudan al funcionamiento del cuerpo como son el sodio, calcio, potasio, cloro, magnesio y bicarbonato entre otros.