viernes, 18 de noviembre de 2011

EL YO DE AHORA


El Yo de ahora. Nos conocemos a nosotros mismo.
Eso es lo más importante que tenemos que tener en cuenta, si realmente nos conocemos, yo creo que no que no nos conocemos y ahí radica muchas veces el error que cometemos en nuestra recuperación, que creemos que lo sabemos todo de nosotros y no sabemos casi nada.
Por que cuanto tiempo hace que yo no se como era antes de convertirme en enfermo dependiente, no he saboreado esa forma de ser mía, puede que tenga que hacer muchos esfuerzos y con todo y eso no consiga acordarme de cómo era antes, pues eso es muy importante ya que casi todos los enfermos dependientes en el fondo somos buenas personas, lo que pasa es que el alcohol o la droga que haya sido nos ha convertido en seres despreciables, descontrolados, ha sacado de nosotros lo más malo que llevamos dentro, eso es lo que tenemos que analizar, y pensar que podemos ser lo que éramos, o por lo menos muy parecidos pues la edad te puede hacer cambiar un poco, pero el fondo siempre será el mismo.
Todos los que venimos aquí por primera vez, venimos obligados por las circunstancias familiares, laborales, judiciales etc., pero siempre el mismo denominador común, la soga al cuello, o en el pozo agarrándome a los clavos que me van quedando, para no ahogarme, pero lo mismo que la soga se aprieta al cuello, los clavos se acaban.
Pero vengamos por el motivo que sea, lo único y más importante que hay es que si yo quiero realmente salir del pozo o aflojarme la cuerda sólo un poquito para poder respirar y seguir con mis andanzas, ahí está el error, pues la vuelta será más dura aun, y digo más dura por experiencia, yo lo he sufrido en mis carnes y no me arrepiento, pues a base de machacar estoy aquí, pero también os digo y os aconsejo que mientras que podáis no recaigáis, se pasa muy mal y si recaes varias veces, según vas recayendo te vas haciendo más daño a ti mismo, y, por lo tanto a los demás (familiares) los destrozas psicológicamente, a veces los puedes recuperar, pero no siempre puede haber esa suerte, y entonces puede ser aun peor la recuperación.
Aunque se parte de la base de que hay que hacerlo por uno mismo y si no salir de esto no se puede, si un piensa salir del consumo por estar bien con los demás, está totalmente equivocado, el fracaso es seguro, lo tenemos que hacer por nosotros, sentirnos bien nosotros, querernos nosotros, mirarnos al espejo y darnos besos nosotros, y si yo hago esto por que lo siento y me siento a gusto conmigo mismo, los demás que no son ciegos lo ven también y sabrán lo que tienen que hacer, yo no les voy a imponer nada ni les voy a exigir nada, pues no estoy en esa predisposición, ellos son sabios pues la vida ha sida muy dura con ellos por mi culpa, ahora me toca ser paciente y educado, y si no me aceptan como soy ahora, cosa que me extraña, ya que en un 90 % de los casos casi siempre las cosas se arreglan y todo vuelve a la normalidad, “normalidad”, ya como se ha dicho antes, con la nueva vida que hemos afrontado y con todas las consecuencias que ello conlleva. Ese 10 % aproximado que la vida tenga que seguir cada uno por su lado. O incluso si no tienes pareja, tus familiares ya no tengan más paciencia contigo, lo mismo siempre nosotros, se afronta y para adelante, por que yo no he cambiado para que me acepten como soy ahora sino para ser yo y ser feliz conmigo mismo y con eso no creo que ahora haga daño a nadie, por lo que mi vida debe de seguir tanto de una forma como de otra, pues sino apaga y vámonos.
Y eso si que no, con lo que me ha costado llegar hasta dar este paso, reconocer lo que para mi era inaceptable, y verlo como lo más normal del mundo, un problema, una enfermedad, llámale como quieras, es mía y yo he decidido el camino a seguir, el camino de la libertad, el camino de la felicidad, ese camino que no voy a dejar por nada del mundo, ni por nadie, ya me trabajaré yo el día a día para que los problemas que me puedan venir, con mi sobriedad los pueda afrontar y darle la mejor de las salidas, ya me prepararé yo mi día a día para que las circunstancias más graves que puedan pasar y pueden porque al igual que yo mi familia está también en este mundo, y las cosas pasan por ley de vida o por otros motivos, para esas cosas por mucho que duela hay que estar preparado, pues nosotros siempre hemos buscado la mejor excusa para consumir y esas circunstancias a las que me refiero han sido siempre las más idóneas. También están los laborables, etc.
Tenemos que pensar que esos momentos son todo lo que hemos hecho para llegar hasta aquí y que nada ni nadie nos lo va a tirar por la borda lo conseguido por mí día a día.

-- La calidad nunca es un accidente. Siempre es el resultado del esfuerzo de la inteligencia.-

No hay comentarios:

Publicar un comentario